Cuando se lee es necesario sentirse identificado o aliviado con esa lectura, que te incite a seguir leyendo y descubrir lo que esconde cada página o dejarte llevar por la imaginación de ese mundo paralelo.
Hay libros que nos hacen sentirnos identificados con la historia que nos cuentan, otro que nos hacen recordar personas que, por una situación u otra, ya no están con nosotros, otros que nos hacen revivir una parte de nosotros, la cual parece muy real, y volver a ese mismo instante, otros que nos hacen reír como niños o llorar de emoción, otros que, sin embargo, solo son una vía de escape a un día gris o una época problemática y por supuesto son capaces de hacernos tener todo tipo de sentimientos hacia el protagonista, enamorarse de él como si de toda la vida lo conociéramos u odiarlo cual malo en las películas.
Un libro puede ser tanto un espejo como una ventana, puede reflejar una época de tu vida, tanto buena como mala, o simplemente un pasatiempo, una manera de pasarlo bien durante el tiempo libre.
Es necesario que un libro sea tanto un espejo donde se puede ver cada uno reflejado, pero también una ventana en la que crear, imaginar, sentir y abrir nuevos pensamientos a cosas pasadas o futuras.
Hay libros que nos hacen sentirnos identificados con la historia que nos cuentan, otro que nos hacen recordar personas que, por una situación u otra, ya no están con nosotros, otros que nos hacen revivir una parte de nosotros, la cual parece muy real, y volver a ese mismo instante, otros que nos hacen reír como niños o llorar de emoción, otros que, sin embargo, solo son una vía de escape a un día gris o una época problemática y por supuesto son capaces de hacernos tener todo tipo de sentimientos hacia el protagonista, enamorarse de él como si de toda la vida lo conociéramos u odiarlo cual malo en las películas.
Un libro puede ser tanto un espejo como una ventana, puede reflejar una época de tu vida, tanto buena como mala, o simplemente un pasatiempo, una manera de pasarlo bien durante el tiempo libre.
Es necesario que un libro sea tanto un espejo donde se puede ver cada uno reflejado, pero también una ventana en la que crear, imaginar, sentir y abrir nuevos pensamientos a cosas pasadas o futuras.