La tortuga tiene mucho sueño y va a dormir todo el invierno. Cuando ya está en cama, después de cumplir con el ritual para irse a dormir (cepillarse los dientes, ponerse el camisón, colocar las sábanas…), alguien llama a la puerta. Son sus amigos, que van llegando con regalos (un gorro, una tarta de pera, una manta…) para acompañarla antes del largo período de sueño que está a punto de empezar. La amistad es importante y la tortuga agradece las intenciones, pero cada vez tiene más sueño y lo único que quiere es que la dejen tranquila para poder dormir…
Roberto Aliaga (Argamasilla de Alba, 1976), es biólogo y escritor de literatura infantil. Aterrizó en la LIJ en 2005 y a partir de la buena acogida de crítica y público de Cactus del desierto, ha seguido escribiendo y publicando a buen ritmo. Su producción se centra sobre todo en el álbum ilustrado, aunque también es autor de novelas, como la serie Entresombras, pero siempre dirigidas a un público infantil.
Sus obras han sido traducidas a 13 lenguas: catalán, gallego, euskera, inglés, francés, portugués, italiano, alemán, turco, japonés, coreano, brasileño y polaco.
Desde el punto de vista formal, la historia está construida a partir de rimas, repeticiones, enumeraciones, y con un lenguaje sencillo que funciona muy bien con los más pequeños. El juego de onomatopeyas, reforzado por la ilustración, le da un tono lúdico a la narración y marca un ritmo en el que los oyentes pueden participar.
La historia también se puede seguir perfectamente a través de las ilustraciones, llenas de ternura y humor, y con estilo propio y las texturas inconfundibles de Alessandra Cimatoribus. Seguro que la simpática tortuga y sus amigos conquistarán en seguida al lector, por su carácter amable y por su fuerza expresiva.
En definitiva, un álbum para que reforcemos hábitos saludables y para que completemos el ritual de irse a la cama, con un cuento, justo antes de que nos venza el sueño.